PROCEDENCIA

El albaricoque procede del Norte de China. Las rutas de especias que comunicaban Asia y Europa, así como el poder imperialista de la cultura romana, hicieron que fueran estos los que introdujeran el albaricoque en el continente europeo, a través de la actual Armenia, de donde deriva su nombre: Prunus armeniaca. Hoy en día los cultivos se encuentran principalmente en el sureste de España, y el resto de países mediterráneos, incluso es cultivado en países como Austria y Suiza.

ASPECTO

El albaricoque es un fruto de forma redonda a ovalada, de color amarillo a anaranjado, tiene una chapa roja en la zona expuesta al sol, y puede tener un tamaño desde 4 hasta 8 cm. Su tamaño es algo menor que el de un melocotón. La piel es suave, aterciopelada y tiene una costura sobre toda su parte lateral. La carne puede ser blanca, amarilla o de un color anaranjado intenso, muy jugosa, azucarada y perfumada, con un sabor especialmente agradable.




VARIEDADES

Mirlo Blanco, Mirlo Naranja, Pinkot, Kioto, Bulida, Canino, Nancy, Moniquí, Paviot, ...


CAULIDADES NUTRICIONALES

Es una de las frutas más ricas en carotenos, sobretodo en beta-carotenos, con actividad provitamínica A y que ayuda en la prevención de las cataratas, el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. El aporte energético del albaricoque no pasa de 47 kilocalorias por 100 gramos, así un albaricoque de tamaño medio que pese 65 gramos no le provee de más de 30 kilocalorías, el color naranja del albaricoque se debe a su contenido en caroteno que varía entre 1,5 a 3 mg por 100 gramos (cuanto más intenso es el color más contenido). Contiene una buena cantidad de vitamina A, hasta el punto que lo convierte en la fruta líder en esta vitamina. Además contiene vitaminas C, B y E. También es rico en minerales por detrás de la banana y por delante de la uva o las naranjas, aportando hierro, potasio, fósforo, magnesio y calcio. Recomendados para el estrés y en digestiones pesadas. Además, contiene pequeñas cantidades de flavonoides con actividad antitrombótica y antioxidante.

CONSERVACIÓN Y CONSUMO

Se recomienda conservar en la nevera y consumir a temperatura ambiente, para disfrutar de todos sus matices de sabor y aroma. Consumido “maduro en su punto” es un fruto delicioso y muy digestivo.